El objetivo preferente de nuestra misión es la evangelización. Somos herederos de un proyecto educativo iniciado por san Marcelino Champagnat, cuyo fin es “dar a conocer a Jesucristo y hacerlo amar”.
Un equipo formado por educadores de todas las etapas del colegio, y en el que están presentes los diferentes ámbitos pastorales. Se encarga de coordinar y preparar los materiales que luego todos los educadores utilizan para animar las diferentes actividades.
Todas las mañanas dedicamos los primeros minutos de la jornada a poner el día en manos del Padre. Combinamos motivaciones audiovisuales, oraciones tradicionales y momentos de expresarse y de compartir.
Celebramos los tiempos fuertes del año con momentos celebrativos junto con otras clases o en clave de oración en el aula. Nos adaptamos a la edad de cada grupo y buscamos que estos momentos sean espacios abiertos e integradores a todos.
Preparamos a los alumnos para la celebración de la Primera Comunión con catequesis durante los cursos de 3º y 4º de educación primaria. La preparación la realizan con educadores del centro, y la celebramos en el propio colegio durante las últimas semanas del curso de 4º Primaria.
Evangelizamos a través de la educación, con especial dedicación a los más necesitados, y respondemos desde nuestros centros, colegios católicos, ofreciendo a la sociedad una formación integral según la pedagogía de san Marcelino Champagnat, fundador de los Hermanos Maristas.
Los destinatarios de nuestra acción pastoral son los niños y jóvenes, las familias y los educadores del centro. Desde los diferentes ámbito, adaptándonos a la realidad de cada destinatario, desarrollamos la acción pastoral centrados en la figura de Jesús de Nazaret.
Evangelizamos atendiendo las cuatro dimensiones de la persona de un modo integral: ser libre, ser fraterno, ser solidario y ser trascendente. Nuestros ámbitos abarcan la pastoral juvenil y vocacional, la pastoral social, la pastoral familiar, la pastoral educativa y la pastoral celebrativa.
Todos los miembros de la comunidad educativa animan la acción pastoral: hermanos, familias, educadores y los propios alumnos. Están llamados a ser testigos, apóstoles, educadores y maristas.
Trabajamos fundamentalmente en equipo. Cada ámbito tiene un equipo responsable que prepara, anima y motiva al resto de educadores para desarrollar las diferentes actividades.
Tenemos dos capillas donde desarrollamos los diferentes momentos celebrativos del curso en el grupo de clase. En ellas celebramos los tiempos fuertes, y dejamos tiempo para que todos puedan pasar a tener un encuentro con ellos mismos, con los demás y con el Padre.
